En la Respiración Tummo, el objetivo es claro: generar calor interior y, como resultado, sus beneficios al mejorar nuestra salud mental y física. Entonces, ¿Cómo funciona exactamente este proceso del Tummo y de dónde proviene?
Tummo proviene del Tíbet y en idioma tibetano se traduce aproximadamente como "fuego interior" y es, en términos generales, una técnica intensiva de meditación . Consiste en una técnica de respiración específica y, lo que se dice que hace que Tummo sea tan efectivo, una visualización específica.
Existen muchísimas técnicas de respiración, y todas nos afectan de forma diferente: algunos ejercicios pueden aliviar el estrés, otros ayudan con afecciones como el insomnio o la apnea del sueño , mientras que otros pueden llenarnos de energía.
Cada respiración envía información crucial al cerebro, corazón y pulmones a través del sistema nervioso autónomo, que gestiona funciones corporales como la frecuencia cardíaca, la digestión y la presión arterial. Muchos damos por sentado este proceso, pero lo cierto es que, si dedicamos más tiempo a concentrarnos en el asombroso poder de la respiración, podemos elevar el funcionamiento de nuestro cuerpo y mente a nuevos niveles. Como dijo el famoso monje y líder espiritual vietnamita Thich Nhat Hanh: «Dominar la respiración es controlar nuestro cuerpo y mente».
¿Qué es la respiración Tummo?
La Respiración Tummo, traducida como "Fuego Interior", es una antigua forma de práctica de respiración del budismo tibetano, diseñada para aumentar la sensación de calor interior y producir diversos beneficios para la salud física y mental. Consiste en elevar la temperatura corporal normal a nuevos niveles mediante una combinación de visualización, respiración y tensión muscular. Esta técnica puede emplearse en diversos contextos prácticos, por ejemplo, en un baño de hielo o una ducha fría, o al aire libre en climas fríos. Sin embargo, también puede utilizarse como una forma de meditación silenciosa sobre el asombroso poder del cuerpo humano.
Esta práctica también se conoce como Respiración G-Tummo o Meditación G-Tummo. Si ves que se usan estos términos, es importante saber que se refieren a la misma forma de práctica de meditación. En breve, explicaremos los detalles de cómo practicar la respiración Tummo, pero primero, veamos rápidamente el origen de esta antigua técnica.
Orígenes de la práctica
La técnica G-Tummo se remonta a textos sagrados del budismo tibetano del siglo VIII. Dadas las condiciones extremas de la meseta tibetana, donde las temperaturas suelen descender por debajo de cero debido a la gran altitud, no sorprende que se haya ideado este proceso para aumentar la temperatura corporal. También conocida como Chandali Yoga , esta práctica está diseñada para despertar el fuego interior del cuerpo y, como resultado, permitir a los meditadores una mejor concentración y relajación.
La profesora de respiración Gwen Dittmar describe la respiración Tummo como "una antigua meditación tántrica que utiliza la respiración bioenergética y la visualización para avivar el fuego interior". Prácticas de respiración como esta pueden ayudar a establecer una conexión más profunda entre la mente y el cuerpo, pero pronto exploraremos sus diversos beneficios. Antes de eso, es hora de explicar exactamente cómo emplear este poderoso ejercicio.
Cómo practicar la respiración tummo
La Respiración Tummo consta de tres pasos clave, cada uno crucial para la eficacia de la práctica. Analicémoslos y exploremos cómo puedes usar el poder de estas técnicas físicas y mentales para aumentar tu temperatura corporal central y alcanzar un nuevo estado .
Paso 1: Visualización
Visualiza un fuego ardiendo dentro de tu estómago. Coloca las manos sobre el estómago y visualízate como un globo grande y hueco con una pequeña fuente de calor en el centro. Siente el calor en el estómago y mantén esta visualización del fuego en todo momento durante el resto de la práctica.
Paso 2: Inhala y alimenta el fuego.
El siguiente paso consiste en manipular el cuerpo mediante la práctica de una técnica de respiración específica llamada "respiración del jarrón". Inhala, moviendo el cuerpo hacia atrás e imagina que el oxígeno que ingieres aviva las llamas del fuego en tu vientre. Exhala fuerte y lentamente por la boca, con los labios redondeados, como si soplaras con una pajita. Realiza un balanceo lento y suave al inhalar y exhalar. Este tipo de movimiento dinámico te ayuda a crear un ritmo; y mientras realizas esta rutina, intenta notar el calor que se acumula en tu interior.
Paso 3: Sujeción del vientre base
En la quinta inhalación, retén la respiración y traga, lo que impulsará el aire hacia el abdomen. Mientras tragas, levanta simultáneamente los músculos abdominales y pélvicos (son los que se usan para detener el chorro de orina, así que imagina que lo haces). Retén la respiración unos segundos y siente el fuego en el abdomen al hacerlo. No te fuerces demasiado, ya que podrías sentirte débil o mareado. Cuando sientas que no puedes contener la respiración por más tiempo, exhala lentamente.
Una vez que hayas completado este proceso de 3 pasos, repítelo inmediatamente. Continúa trabajando para generar calor en tu vientre mediante la visualización, la respiración profunda y la tensión muscular. Aunque al principio pueda parecer difícil o complicado, con el tiempo, esta forma de generar calor psíquico se volverá más natural y fácil de experimentar.
¿Cuánto tiempo dura la respiración Tummo?
Esto puede variar según la persona; sin embargo, en cada sesión de Tummo, deberías intentar completar al menos 2 o 3 rondas del proceso de 3 pasos, o incluso más. Algunos meditadores más avanzados pueden practicar la respiración Tummo durante un periodo prolongado, por ejemplo, de 30 a 45 minutos, pero no siempre es necesario, sobre todo si eres principiante. También conviene considerar a qué hora del día eliges practicar la respiración Tummo. Este ejercicio puede aumentar considerablemente tus niveles de energía y animarte, así que es mejor no hacerlo justo antes de acostarte. El momento ideal para practicarlo es probablemente a primera hora de la mañana.
La ciencia detrás del 'Fuego Interior'
Aunque la Respiración Tummo fue desarrollada originalmente por monjes budistas tibetanos, a medida que la atención plena y la meditación han ganado mayor fuerza en Occidente, los científicos han comenzado a estudiar los efectos de esta técnica. En la década de 1980, el Dr. Herbert Benson, profesor de la Facultad de Medicina de Harvard , realizó un estudio sobre los efectos de la respiración Tummo en monjes budistas.
Mediante registros de electroencefalografía (EEG) y mediciones de temperatura, descubrió que la práctica podía provocar importantes aumentos de la temperatura corporal central, desde la temperatura corporal normal de 98,6 °F (36,6 °C) hasta 101 °F (38,3 °C). Incluso en condiciones de frío extremo, con monjes tibetanos meditando al aire libre vestidos únicamente con unas sencillas túnicas de lana, lograron mantener niveles notables de calor corporal.
La investigación de Herbert Benson también descubrió que este ejercicio de respiración puede reducir las tasas metabólicas en un 64%, por lo que sería un error pensar que el "Fuego Interior" solo fomenta aumentos de temperatura limitados. Un estudio de 2013 titulado "Componentes neurocognitivos y somáticos del aumento de temperatura durante la meditación G-Tummo" reforzó esta investigación anterior, demostrando que la respiración Tummo podría tener efectos significativos en la temperatura corporal central, la temperatura de los dedos y la imaginería mental de los participantes.
Y, crucialmente, los científicos han descubierto que el aumento de temperatura proporcionado por la técnica de respiración del jarrón es mínimo sin el componente de visualización de la práctica Tummo. Entonces, ¿cómo podemos usar este ejercicio a nuestro favor? Analicemos los beneficios prácticos de la respiración Tummo con más detalle.
Los beneficios de Tummo
Al igual que muchos otros ejercicios de respiración, la meditación tibetana Tummo ofrece diversos beneficios para la salud, muchos de los cuales están relacionados con la reducción del estrés y el manejo de la ansiedad. Prestar atención a la respiración puede ayudar tanto a meditadores principiantes como expertos, devolviéndolos al momento presente y reduciendo el volumen de la mente mono .
La práctica regular, incluso durante un período de tiempo relativamente corto, puede ayudar a los meditadores a cultivar una mente más clara, honesta y abierta. Dentro del contexto espiritual de la meditación Tummo, los monjes tibetanos suelen utilizar esta técnica para eliminar pensamientos pecaminosos.
En este sentido, Tummo comparte muchos puntos en común con otros ejercicios de meditación basados en la compasión, como la alegría empática o la meditación Tonglen . Además de ayudar a aumentar los niveles de felicidad y combatir los pensamientos y emociones negativos, Tummo también puede reducir el impacto de problemas de salud relacionados con el estrés, como la ansiedad, la depresión, la hipertensión y las irregularidades cardíacas.
La respiración Tummo también puede tener un efecto positivo en el rendimiento cognitivo y ayudar a quienes la practican a desarrollar una sensación de ego más baja y un mayor sentido de poder personal. Estos cambios en el rendimiento cognitivo y el funcionamiento interno de la mente pueden facilitar formas más profundas de meditación.
Quizás pienses que la respiración Tummo parece compartir varios beneficios y aspectos prácticos con el famoso método de respiración de Wim Hof, que le ha permitido batir varios récords mundiales de exposición al frío y resistencia. Entonces, ¿cuáles son las diferencias?
¿Son los efectos similares a los del método Wim Hof?
Mucha gente compara la Respiración Tummo con el método de Wim Hof , y de hecho existen algunas similitudes clave. Sin embargo, es importante destacar que se trata de dos prácticas distintas. Por un lado, Wim Hof describe su método como relacionado principalmente con la "naturaleza fría y dura", mientras que el Tummo tiene profundas raíces espirituales y fuertes vínculos con la tradición budista. Una de las distinciones clave es la visualización del fuego, que representa una parte esencial del Tummo.
Ahora deberías tener una buena idea de lo que implica la respiración Tummo, así como de dónde se originó esta práctica y los beneficios que puede producir. Usar la visualización, el patrón respiratorio y la contracción muscular de la técnica Tummo puede ayudarnos a aumentar nuestra temperatura corporal normal, gestionar las presiones externas e internas, reducir los pensamientos y emociones negativos y acceder a nuevos modos de pensar.
Antes de dejarte probar este método, repasemos algunos puntos clave a tener en cuenta y agreguemos un par de consejos adicionales para tener en cuenta.
Recuerde los tres pasos de Tummo: visualización, técnica de respiración del jarrón y postura base del vientre.
Tenga en cuenta que las prácticas espirituales como la respiración Tummo del budismo tibetano están impulsadas por el deseo de reducir los pensamientos y sentimientos negativos o “pecaminosos” y aumentar la compasión.
Este ejercicio de respiración se practica mejor con el estómago vacío. Dado que se necesita contraer el abdomen y respirar profundamente, resulta mucho más cómodo si no se tiene el estómago lleno .
Practica primero con un guía. Desarrollar tus conocimientos prácticos aprendiendo de meditadores expertos y practicantes de respiración te dará más confianza para practicar por tu cuenta.
Existen algunas condiciones físicas y médicas que pueden hacer que esta práctica sea potencialmente riesgosa, así que consulte a un médico antes de practicarla si está embarazada, tiene epilepsia o padece hipertensión o enfermedades cardíacas. En caso de duda, consulte primero con un médico.
Si tienes en cuenta estos sencillos consejos y trucos, es posible que la respiración Tummo te brinde una experiencia realmente poderosa. Aumentar la sensación de calor corporal interno puede ayudarte a lidiar con la exposición al frío y a reducir el estrés y la ansiedad, además de otros beneficios.
La respiración tummo es más que una simple técnica de meditación; es una práctica de salud que ha intrigado tanto a profesionales como a investigadores. Su potencial para mejorar diversos aspectos de la salud la convierte en un tema digno de un ensayo detallado sobre salud , que invita a explorar más a fondo sus raíces tradicionales y sus aplicaciones modernas.
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